La Sima se abre en las inmediaciones de la antigua carretera de subida a Sierra Nevada, al salir de las curvas del Dornajo, en el paraje conocido como “Monte Ahí de Cara” a una altitud sobre el nivel del mar de 2.100 m
En una entrada efectuada el pasado mes de mayo, por la boca tradicional, para comprobar el estado de limpieza de la sima, se observa que desde el interior de la misma no se ve la luz del exterior, por la boca del P-40, siendo posible que en las repisas de dicho pozo se encuentre basura.
A saber este pozo tan solo se había bajado en una ocasión, por Guillermo García González y otros compañeros.
En una subida previa Andrés Santaella, equipa parte de la cabecera del pozo, comprobando que a pocos metros hay una gran repisa. Al ir solo no baja.
En esta nueva exploración se completa la instalación de la cabecera y se desciende la primera vertical, encontrando algunas bolsas de plástico, un neumático de coche y una especie de caballete metálico junto con alambres y latas de refrescos. Es de mencionar que el paraje donde se ubica la sima fue un antiguo vertedero de la estación invernal de Prado Llano.
Al fondo de la primera repisa se abre una nueva vertical, hasta otra repisa, que se equipa con un Spit. Continuando el descenso por varios pozos hasta alcanzar la rampa del fondo.
En esta entrada se aprovecha para efectuar la topografía de este pozo.
La topografía completa se realizó el 6 de febrero de 1977, publicándose en la página 42 del nº 1 de la revista Spes (1981), no descendiéndose el pozo en aquella ocasión, al estimar que comunicaba directamente con el exterior. En total la cavidad tiene una profundidad de 73 m.
Equipando la boca de la Sima