El
pasado ocho de marzo, Día de la Mujer, nuestras compañeras Alicia, Alo y Helena
(esta última acompañada por su padre Agustín por ser menor de edad) se
dirigieron a Alicún de las Torres para realizar una doble actividad: la vía
ferrata de Alicún y el barranco de Raja.
En lugar de la habitual aproximación a pie
hasta la cabecera del barranco de la Raja de Alicún ascendieron la sencilla vía
ferrata de Alicún, catalogada como K2 que supuso un estupendo calentamiento. Se
trata de un itinerario generosamente equipado, sin pasos especialmente técnicos
o complejos, en el que cabe destacar un aéreo puente tibetano evitable por la
izquierda.
 |
1 Aproximación Ferrata. |
 |
2 Alicia y Alo en uno de los pasos. |
 |
3 Puente de tibetano |
Una
vez superada la vía ferrata acometen el descenso del barranco; Seco en todo su
recorrido, a excepción de una última poza, de escasa profundidad pero en la que
se debe evitar el agua: muy estancada y repleta de heces de las diferentes aves
que anidan en las paredes del cañón, por lo que se recomienda encarecidamente
descenderlo solo tras abundantes precipitaciones.
Los siete rápeles (el mayor de ellos de 25
metros) que forman este barranco se encuentran poco espaciados, son poco
comprometidos y muy espectaculares por la gran altura y el color tan blanco de
sus paredes.
 |
4 Indicaciones previas. |
 |
5 Helena rapelando. |
 |
6 Alicia en una de las cabeceras. |
 |
7 Vista inferior de uno de los rapeles. |
 |
8 Pasando bajo el puente. |
Tras
bajar el último de estos rapeles empiezan a aparecer pequeños aportes de agua
caliente (en torno a los 30º) hasta llegar a una gran badina en la que se puede
incluso nadar, o relajarse bajo una pequeña cascada.
 |
9 Primer aporte termal. |
 |
10 "Spa natural". |
 |
11 Relajándose en los baños tras la actividad. |
0 comentarios:
Escribe aqui tu espeleocomentario